Grietas

La principal causa de las grietas en el pezón es la mala posición del bebé al pecho.

Otra causa puede ser un frenillo que no permite al bebé mover bien la lengua.

Si sólo agarra el pezón, hace mucha fuerza y causa dolor y grietas.

El tratamiento consiste en corregir la posición. Al tener la boca bien abierta y el pecho bien metido dentro, el bebé ya no aprieta sobre la grieta. El dolor casi desaparece, y la herida se acaba de curar en unos días.

No se necesita ninguna pomada. Las pomadas no sirven de nada si la posición sigue siendo mala.

En algunos casos las grietas se infectan, y hay que aplicar un antibiótico en pomada, o incluso tomar antibiótico por vía oral.

Las pezoneras tampoco solucionan el problema. En algunos casos el dolor de momento disminuye (en otros, ni eso, porque la pezonera roza con la grieta), pero la posición del bebé no mejora, sino que cada vez mama peor. Cuando se usa una pezonera, hayque volverla a quitar a los pocos días.